El anti-héroe (lecciones en narrativa)

Hola, de hecho no soy un anti-héroe

La palabra anti héroe es universalmente usada para definir a cualquier héroe que:

• Sea sarcástico.
• Tenga algún tipo de fortuna en ciertas situaciones y use la característica anterior para referirse a ellas.
• Eventualmente le entren a coñazos.

La gente escucha héroe y piensa en esto:

Ambos son superhéroes pero sólo uno es un anti-héroe (para un lado de la audiencia), el otro es un héroe. Batman es, sin lugar a dudas, el personaje más elaborado en la historia de DC Comics (por no decir el único).

Un héroe es un personaje que consigue sobreponer sus temores, enemigos e imposibilidades y conseguir alcanzar una meta, derrotar un obstáculo haciendo uso de su compás moral. Un anti-héroe aparenta tener su compás moral escoñetado.

Batman no es un anti-héroe, para nosotros, pero sí lo es para la gente de Ciudad Gótica. La idea de un vigilante enmascarado que combate el crimen es sinónimo de demencia. Él sobrepone sus problemas personales, criminales, oficiales corruptos y mil problemas más rompiendo la ley. Batman es considerado un criminal en Ciudad Gótica y lo que está haciendo va contra la ley, la cual todos respetan. Nosotros sabemos la verdad, y para nosotros, Batman es un héroe.

Superman, por el otro lado, no tiene ningún inconveniente. Pero ni siquiera es la definición de héroe. Superman no tiene nada que superar, excepto la criptonita, es invencible. El problema de Superman es que su viaje externo (combatir el crimen) es más entretenido que su viaje interno (nada). Por el otro extremo está Batman, que sin su obsesión por la soledad, la culpa por la muerte de sus padres, su repulsión al compromiso, sería solo un millonario disfrazado golpeando a locos maquillados. La personalidad de Batman y la forma en la que combate el crimen y mantiene un balance con su vida personal es lo verdaderamente interesante, y lo que nos hace volver.

Hay gente que llama a V (de Vendetta) un anti-héroe, porque rompe las leyes, pero esto no tiene validez cuando las leyes son impuestas por tus enemigos. En tal caso, V es un anti-héroe para la gente que vive subyugada por la maquinaria fascista del Primer Ministro y que saben que él está luchando contra fuerzas que ellos respetan, no para sus detractores, no para nosotros.

Un gran ejemplo de anti-héroe viene a ser Han Solo. El tipo parece querer buscar el camino fácil a cualquier situación en la vida, está dispuesto a lo que sea, y su único lineamiento moral es un simple código de honor combinado con lástima y el valor de su palabra. El héroe de Star Wars es el honesto y trabajador Luke, pero Han cae al otro lado del espectro. Es un mercenario, un anti-héroe.

John McClane es un policía que en su labor rompe todas las leyes posibles (las cuales juró preservar, seguir y proteger) para atrapar terroristas y ladrones. De hecho, no tiene respeto alguno por la línea de comando cuando se ve confrontando por situaciones como fastidiar al enemigo, peligro en su círculo familiar o alguien que le esté faltando el respeto. Si analizan la forma en la que atrapa a los villanos, usualmente consiste en destruir propiedad pública, manejar como un demente y caerse a tiros con quien sea (explotar cosas también está en la lista).

Ser un anti-héroe es más que sarcasmo y un par de frases oscuras. Involucra irrespetar tu propio compás moral, y el de tus aliados, para conseguir derrotar los obstáculos que te consigas de una forma egoísta o autónoma. Es un anti-héroe porque un héroe hace totalamente lo opuesto.

El Barón Rojo es un héroe de la WWII. Sí, era un nazi, pero derribó una cantidad absurda de aviones siguiendo las estrategias alemanas, con tecnología alemana y respetando al pie de la letra la filosofía Nazi. Nadie le va a decir que era un anti-héroe porque estaba con los chicos malos, era un héroe... malo.

Desarrollar un anti-héroe es difícil. Hay que darle muchos motivos al anti-héroe para ser como es, eso es complicado. No es común que alguien vaya en contra de todo lo que conoce, mande eso al carajo, gane, y todavía el público simpatice con él. Es un fino balance que solo puede ser conseguido por personajes bien desplegados y multidimensionales. Es por esto que desarrollar un anti-héroe tiene ciertos riesgos:

• La gente no lo quiera.
• Se pueda terminar desacreditando el conjunto de reglas morales que el anti-héroe desecha, dando a entender que él es mejor que el resto de la sociedad, victimizándolo y llevando la carga antagótica al universo en el que se encuentra, cosa que capaz no quisiéramos hacer.
• La gente no lo pueda diferenciar con el villano y terminen persiguendo metas similares. Esto haría que nos saliéramos de la estructura de camino de héroe de la historia.
• Que nadie entienda nada.

No es necesario crear un anti-héroe para hacer a nuestro protagonista sarcástico y astuto, simplemente hay que estar claro qué obstáculos va a superar y quiénes se lo colocan. Cuando estos obstáculos vengan de la sociedad (jueces corruptos, policías inútiles) es cuando el anti-héroe lucha contra lo establecido para reestablecer el orden de las cosas.

Al final, lo que importa es que el espectador decida quién es quién.

buenochao!