Nov 26, 2011

Buenochao... redes sociales

Siempre he twitteado bastante, todos los que me conocen saben que hablo bastante. Fui hijo único hasta los 15 años y no había internet, así que crecí básicamente hablando solo. Creo que uno tiene un flujo de información que tiene que destilar en el día, semana, o en el mes. No es un número, pero sí es un sentimiento.

Casi todos mis amigos se han ido del país, están en otro huso horario, o ya no chatean porque tienen cosas que hacer y no lo incluyen en su rutina, así que digamos que por ese lado bajó radicalmente mi quota comunicacional. Viendo hacia atrás la volqué esta quota en mi cuenta de Twitter y Facebook. Básicamente porque rara vez hay gente a la mano a la que le pueda decir casualmente "mira esto que conseguí", y esto pasa bastante. Cuando uno sale con alguien compartes mucho con esa persona, y cuando se van, pues queda un vacío más grande que creías haber llenado. Al final lo medio llenas haciendo el equivalente a gritar en una plaza, pero en lugar de gritar escribes y en lugar de una plaza es Twitter.

Nunca entenderé a la gente que cierra sus cuentas de redes sociales al terminar una relación o en algún momento de sus vidas. Aprecio mucho todo el contenido que he generado, pero sí siento que puse demasiado esfuerzo. La realidad es que debería dedicarme a terminar mi libro. Vale acotar que todo al que le he pasado avances no los ha terminado de leer. Esto es inmesurablemente desmotivante. Mucha gente ni siquiera revisa el primer capítulo o el prólogo.

Sé que tengo cierta influencia y la gente disfruta lo que escribo, pero en realidad siento que twitteo porque perdí ese círculo de amistades en el que compartía información y recibía cierto feedback (así sea de la época de cuando uno colocaba un link en el status de MSN). En fin, me aburrí, y creo que las redes sociales merecen un contenido mejor que mi desbalanceo psicológico emocional.

Entonces he decidido que le voy a bajar mil a todo esto del social media. Seré igual de accesible por FB o TW y trataré de responder con la misma prioridad que le doy a estos medios (la misma velocidad de un SMS o una llamada, en mi mente tienen igual prioridad). Pero I'm done with this microblogging thing.

Si algo no es bloggeable, entonces no lo voy a microbloggear. Trataré de integrar ese contenido e ideas en proyectos mayores y más divertidos. En escribir y ser una persona menos dispersa. Y pensar mejor lo que escribo. Y es que los tweets muchas veces no tienen contexto, tono o forma. Este contexto, tono y forma, se lo coloca el receptor, y a veces el receptor termina pensando que uno es un pendejo. Lo cual no está lejos de la verdad, pues como emisor uno deja que esa información sea libremente interpretada sin preocuparse por cómo será recibida, entonces si dejas que se pueda interpretar de una manera en particular es porque estás de acuerdo con esa opción. Y en cierta forma es verdad, porque es su opinión, y una opinión nunca está equivocada. Pero sepan que siempre trato de seguir el enfoque de Ricky Gervais sobre la comedia:
I never actively try to offend. That’s churlish, pointless and frankly too easy. But I believe you should say what you mean. Be honest. No one should ever be offended by truth. That way you’ll never have to apologize.
Algo así. Solo que sin darme cuenta he tratado de aplicar esa filosofía no solo a la comedia, sino en la vida, y a veces decir la verdad te hace quedar como un tonto. Y el único elemento con el que puedes jugar es con el cuándo y no el contenido.

Siempre me pasa que hago un chiste y termino recibiendo una patada por un comentario. Esto no ocurre cuando escribo en mi blog, cuando es una historia corta o en mi libro (que nadie ha leído completo, así que voy a suponer que funciona igual), en general, cuando pienso. En fin, aprovecho para pedir disculpas a todos (menos funcionarios chavistas) los que hayan interpretado en algún momento que yo estaba tratando de ofenderlos, no estaba tratando de hacerlo. Pero al permitir esta interpretación de su parte, los ofendí. Todo es parte del conjunto de ideas y la colección experiencias que uno vive.

Again, acá estaré, en mi blog, y espero estar en un futuro a mediano plazo en algún stand (up?) de una librería o en una pantalla. Si, por casualidad, extrañan mi flujo de tweets o posts en Facebook, piensen que trataré de materializar todas esas ideas en cosas más completas que al final sean un poco más permanentes.

Sin más nada que decir, disculpar o explicar... #twitteroff (or something).

buenochao!

3 comments:

Viviana Trujillo said...

Creo que tu desbalance emocional no es tan malo al final de todo, si después de escribir tanto y tanta paja aún te siguen, es un indicativo de que esa paja a algunos nos gusta.

Ahora, si prefieres dedicar tu tiempo a cosas más productivas bien por ello, siempre debes hacer lo que realmente te haga feliz sin importar lo que digan los demás.

Extrañare esos comentarios random-locos y espero que nunca te aburras de tu blog.

p.d. Saca el libro pronto!!! :)

Natalia Álvarez Morillo said...

Cuando uno tiene un desbalance emocional arrecho, uno usa lo que tiene a la mano para desahogarse. Yo también pasé por eso, probablemente perdí un montón de seguidores pero ajá, a veces hay que escribir como si no hubiese nadie leyendo.
¿Tienes un libro? Can I have a look?

Escribir es una de las labores que más requiere disciplina y en eso ayuda Twitter, a mantener la disciplina.

XOXO

d@N1 said...

No te imagino fuera de todo ese peo...