Domingos

El Séptimo día Dios tuvo terminado su trabajo, y descansó

Sí, descansó. En ningún lado dice que Dios "se tiró en la cama a ver películas en HBO y pedir pizza por teléfono". Odio los domingos.

Ya odiaba los domingos viviendo en Caracas, nadie hace nada, pero al menos podía salir a buscarme la vida en medio de centros comerciales que tenían tiendas abiertas e ir al cine. Acá creo que me sale mejor tomarme 2 pastillas de Lexotanil y dormir durante 36 horas hasta el lunes.

¿Soy el único anormal que le gusta hacer algo los domingos? Es una pregunta retórica, no respondan, sé que sí lo soy. No voy a discutir que el domingo es un día jodidamente lento. Si el domingo fuera un animal, sería un hipopótamo. Los odio.

Incluso las cosas religiosas que sí pudiera hacer este día son una patada. Comencé a pensar que no creía en la iglesia católica cuando comencé a bostezar 200 veces por misa. Estoy seguro que un 50% del tiempo que pasan en pijamas ha sido en domingos. En fin, mis domingos son como una dosis de ... nada, así de insípidos son.

buenochao!